Si bien creo que esta iniciativa es adecuada, pienso que es pertinente comentar la importancia de contar con un plan de acción concreto.
Por Gerardo Castillo. 25 octubre, 2016.Durante los tres últimos días hemos leído y escuchado opiniones de diferentes autoridades respecto a la necesidad de declarar en emergencia el sector Salud de la región Piura. Si bien creo que esta iniciativa es adecuada, pienso que es pertinente comentar la importancia de contar con un plan de acción concreto.
Este plan se debe basar en un diagnóstico correcto, que permita sustentar debidamente la declaratoria de emergencia y el tiempo que se considera suficiente para cambiar en algo la situación que atraviesa el sector Salud. Si no tenemos claros estos tres aspectos, habremos desperdiciado una gran oportunidad para que la población más necesitada tenga acceso a una salud de calidad; y habremos perdido la credibilidad no solo ante la población piurana sino también ante los trabajadores de salud.
La crisis en salud, de la región Piura, no es solo de presupuesto y más dinero para personal, infraestructura y equipamiento, sino que es un problema de gestión de los recursos: una de las grandes debilidades de nuestro sistema de salud.
Así, por ejemplo, no existe una correcta evaluación de los procesos ni una adecuada planificación de los servicios, por lo que – actualmente– se ha desbordado la capacidad de atención de los diferentes establecimientos, especialmente de los hospitales. Y, si no se han tomado en cuenta principios básicos de la gestión y/o administración hospitalaria, es porque no se cuenta con la participación directa de profesionales con esta formación, en las jefaturas y direcciones de los establecimientos de salud. Esto debe corregirse a la brevedad posible.
Es importante considerar que, al término de un período de emergencia, no tendremos un sector Salud en Piura, totalmente distinto al actual: eficiente y que atienda adecuadamente todas y cada una de las necesidades de salud de los piuranos. Por tanto, es conveniente reconocer que necesitamos reorganizar todo el sistema de salud de nuestra región lo más pronto posible.
Finalmente, si bien es cierto que la declaratoria de emergencia sería para los establecimientos del Minsa, invoco a nuestro Gobernador a continuar asumiendo la defensa de los asegurados (EsSalud), de los policías (Sanidad de las FF.PP.) y de los militares y sus familias (Hospital Militar); también son nuestros conciudadanos y también son su responsabilidad.